Uno de los errores más comunes en la actividad física es el empleo de herramientas estandarizadas o genéricas. Por ejemplo, seguro que más de uno de vosotros habéis utilizado planes de entrenamiento publicados en páginas de internet especializadas, o habéis seguido los consejos que le han funcionado a un amigo. Cada persona es totalmente distinta al resto, aunque aparentemente sean calcados como los protagonistas de la foto, puede que tengan diferente estado de forma o sufran patologías diferentes. Son múltiples los factores que afectan a nuestro rendimiento. De ahí la necesidad de un plan especifico personalizado, que se ajuste a nuestras necesidades y objetivos. Si sigues un plan diseñado para ti, alcanzaras tus metas y además lo harás sin lesionarte.